NARRADOR, AUTOR, LECTOR, NARRATARIO

Pues sepa Su Eminencia Reverendísima don Fernando, ante todas cosas, que a mí llaman Xuan MCadarma, hijo de Benjamín González y de Salud Pérez, naturales ambos de Govezanes, barrio perteneciente a la parroquia de Bueres, en el concejo de Caso. Mi nacimiento fue dentro del cementerio, por la cual causa tomé el sobrenombre de Cadarma.

En septiembre, una incauta lectora de mis textos para Facebook y no muy docta en lengua asturiana, tomando a narrador por autor, entendió que este ese mediodia iba a almorzar con el Espíritu Santo, o sea a suicidarse, y viendo que el protosuicida no le atendía las urgentes llamadas telefónicas, habiéndose hecho con el número de José y María, para ella Benjamín y Salud, la incauta Rosa le subió la tensión arterial a la madre Mari a las cumbres de algo grave le ha pasado a nuestro hijo. Iba Cadarma a almorzar con don Fernando mientras yo recorría apaciblemente parroquias de Gijón en la Vespa de Senén sin intención además alguna aquel mediodía la Cadarma ni yo de acabar almorzando con el Espíritu Santo en su casa. Lectora así es un peligro y peligros así más vale bloquearlos. No nos hablamos desde septiembre.

Cae en tus manos este texto del Catecismo de la Iglesia Católica y, letraherido desde los quince o quizás bastante antes, los dos textos anteriores, “Persistencia” y “La vida débil”, salen solos:

2447 Las obras de misericordia son acciones caritativas mediante las cuales ayudamos a nuestro prójimo en sus necesidades corporales y espirituales (cf. Is 58, 6-7; Hb 13, 3). Instruir, aconsejar, consolar, confortar, son obras espirituales de misericordia, como también lo son perdonar y sufrir con paciencia. Las obras de misericordia corporales consisten especialmente en dar de comer al hambriento, dar techo a quien no lo tiene, vestir al desnudo, visitar a los enfermos y a los presos, enterrar a los muertos (cf Mt 25,31-46). Entre estas obras, la limosna hecha a los pobres (cf Tb 4, 5-11; Si 17, 22) es uno de los principales testimonios de la caridad fraterna; es también una práctica de justicia que agrada a Dios (cf Mt 6, 2-4).

LA VIDA DÉBIL

De punta a punta, de hospital en hospital, son estas las Navidades del organismo al que la edad vence, ya multiplicado (como Dios manda) o no. Si multiplicado, los múltiplos te acompañan en la postración; si no has cumplido con el mandato del Supremo, encomiéndate a la sola asistencia del sistema de salud. Pupilas dilatadas, corazón jodido. Después de cuatro días a tiempo completo, hoy nos acogemos a la necesidad del turno. Escribo y espero a que las pupilas recobren su diámetro. Escondido de mí, un pájaro que agoniza aletea entre las décimas de segundo; sin que me dé cuenta, una microscópica nada se abre paso en pulsos de negro. ¿Miedo a un enero oscuro, a un 2020 de mierda? Vamos acabando de comer, ya vamos viendo en pupila de tamaño recobrado, ya ir iremos viendo, múltiplo suyo, cómo se le pasan confusas las horas, cómo ella va oficiando de plena esposa antigua en eso que roza la madre prolongada. Yo a lo de siempre, carne feble de tabaco, vino y hospital bordeando los bordes de la vida.

Más de una hora jugando con el nietoide, saturado de juguetes. ¿Qué hemos utilizado? Ocho servilletas de papel.

PERSISTENCIA

Navidades, en la sede central del SO, de animal de compañía de un ASTU cuatro ceros percutido por la edad. 112. Sumos sacerdotes y sacerdotes menores buscan y abren vías; una caja amarilla le alivia la torácica al señor simplificado en muñeco restableciéndole la saturación ordinaria. En su pasado, la Cadarma asiste estupefacta a su futuro. Ese futuro en el que en su pretérito hay que drenar bofes empantanados, eliminar peajes y colocar válvulas de juguete científico; prolongar la vida un poco más porque quién coño mínimamente satisfecho quiere experimentar la desaparición de esposa, hijos y nietos, nubes y mares, lluvia y luz. Navidades en la sede central del SO viendo cómo la vida, con suero glucosado, se agarra al embozo de la cama.

Muerto el cordero, está de muerte. Yo el cordero muerto lo tengo más asociado con la Pascua que con la Navidad, ese olor a carne y grasa quemadas tan grato al naso siempre tan bien dispuesto de YHVH. En la Navidad lo que hay son figuras de portal de Belén de corderos vivos, libres o a hombros de un pastor. Pascua o Navidad, el cordero de muerte con piñones lo está en mi plato gracias a la buena cocina y gentil de mi vecina de enfrente, que sabe de mí desde mis infantiles seis años, cuando ella tenía sus gloriosos dieciocho. Al cordero le doy gusto, como Jesucristo ordena, con dos o tres copas de un gran reserva de Tarragona salido de una mágnum, que puestos a no hacer ni puñetero caso a lo del boicot a los productos catalanes nos tiramos al tamaño doble.

Los clientes de Alimerka han arrasado Mercadona. Supermercados, bancos, smartphones y centros de salud son el cimiento sobre el que estriba toda esta fábrica de disparates. Uno que quite usted, el cimiento se vence y efímera torre de Pisa la sociedad, en pánico, se va por donde vino. Dótennos por doquiera de ellos y a cambio de nuestro bienestar ante el pesebre ustedes podrán seguir siendo, quizás unos siglos más, los putos amos del planeta.

ENTROPÍAS QUE ACOJONAN

Entropía es llegar a casa y lo primero de todo comprobar que doña Luna sigue viva. Entropía es una llamada desde el fijo de tus padres y ponerte en lo peor para uno de ellos, los dos estiradamente vivos gracias a la receta electrónica. Entropía es ir sustituyendo cigarros por chicles de nicotina y mascando uno salir a pasear la Navidad de Gijón de luminotecnia cutre. Entropía es dejar en el fregadero después de la cena plato y cubierto sin fregar (entropía esta de la procrastinación que es la entropía de toda la vida y que a la Cadarma no mete miedo; es más, sin ella la Cadarma no sería la Cadarma y seguramente sería un gilipollas). Acojona, cuando uno no está drogado, la muerte, la entropía de verdad, la del colapso térmico (los platos se friegan y se recogen mañana). No pasa nada: en tres días renace el Mesías (el niñodiós de todos los 2019 años que ahora trabaja para Amazon y las grandes superficies comerciales), la entropía se recoge y en 2020 volvemos a partir de cero. Jojojó.

Donde tendría que estar la izquierda en lugar de en tanta romería de género y transgénero para que situaciones laborales como la de hoy domingo no sigan ocurriendo. Pero la izquierda hace mucho que no está, o está de cuerpo presente. La izquierda, reducida a un manierismo que le interesa al todopoderoso capital, se ha instalado, por seguir haciendo algo, el pijo, en la parida de la paridad y en tocarle los huevos a la Real Academia Española con el lenguaje inclusivo. Mientras tanto, miles de trabajadores, retrotraídos a los tiempos de Maricastaña laboral, dan hoy el callo a cambio de nada amparadas sus empresas por sindicatos de corte vertical. Antes me como las uñas o me bajo al bar que entrar, hoy, a un servicio ya de por sí pródigo en horas anuales. Más de un gilipollas del género y del transgénero habrá ido o irá hoy a comprar.

Se acaban año y primera vuelta con una mejoría por la que el ex de Ikea saca pecho augurando algo extraordinario para junio; una mejoría que frágilmente se sustenta en que ahora Uros marca, porque lo demás del juego del Sporting sigue metiendo miedo y dando pena. Los vecinos, a cuatro puntos de distancia por detrás, sonambulan, canos, por la categoría de plata. A falta este sábado de incentivo otro, para quien lo quiera, a las seis, Sporting - Extremadura.

POR SUERTE

¿De nada (vid multiverso)? al hidrógeno y por la gravedad al helio, y del hidrógeno y helio mutatis mutandis el planeta hasta el elemento natural más pesado (el hassio, incluido el hombre). Una manera como otra cualquiera de resumir trece mil setecientos millones de años, edad estimada de lo que es. Tengo en Facebook una amiga procedente de la intimidad del helio con el helio (la del hidrógeno con hidrógeno original me dijo tururú corneta) que afirma muy severamente, en el contexto de que nos vamos a ir a tomar por el culo, que el hombre, el homo sapiens sapiens, es único y por suerte irrepetible. Mi dilecto Christopher Nolan ya nos ve pillando planeta de otra galaxia agujero de gusano mediante porque en esta por los tiempos de la peli creía que no hay. Mi dilecto Christopher Nolan hace un cine de especie humana única e irrepetible. La Cadarma escribe estas líneas sujeta en mente la amiga que procede de la intimidad del helio con el helio y que intercala el sintagma adverbial de modo que no haya ni un lamer de polla. Por suerte.

BRINDANDO POR EL PULPO ARBORÍCOLA

Siempre quedará un resto que volverá a evolucionar y a diversificarse. Cuenta este planeta con doce extinciones masivas, cinco de la cuales fueron muy gordas. A la última, de origen extraterrestre, le debemos estar aquí haciendo el ganso. Nada, pues, nuevo bajo el sol. Esto de las extinciones se ve que a la República Popular China no se le da un bledo, y Europa, que exige a ArcelorMittal emisiones cero para 2030 y a Europa ArcelorMittal le responde que de qué va, que igual para 2050 pero ver iremos viendo, Europa, íbamos diciendo, se queja de que mientras el nuestro se va aproximando a las costumbres del planeta Venus los chinos nos van a comer vivos: da fe la Cadarma, portadora de un smartphone Xiaomi que por cuatro duros desde hace bastante más de un año funciona como Dios. Creo que era en Futuro Salvaje donde al final la siguiente inteligencia era la del pulpo arborícola. Entre chinos y Arcelores, con un albariño me ceno uno, de momento submarino.

EL TROMPO GIRA

Por volver a ver a sus hijos sueña en el avión que sueña en la furgoneta que sueña en el hotel que sueña en la nieve que sueña en el hogar que sueña en el avión. ¿El trompo no se cae? ¿Cuatro capas de sueño o que toda la vida es sueño y los sueños sueños son? ¿Sueña el asesino que lo mata la víctima que sueña que mata al asesino que sueña que mata a la víctima que se sueña asesinada? ¿Cesa de girar el trompo? En esta vida toda Luna errática gira y muere. ¿Podríamos ser el sueño del sueño del sueño del sueño de alguien que de diez a cuarenta minutos en el primero en el último nos sueña de media ochenta años? El trompo gira y ya no gira Luna, en apariencia recuperada. En este cuarto nivel del sueño de alguien anda la Cadarma con un Val de Anxos, DO Rías Baixas. Sueña don Fernando que se llama Xuan que sueña que se llama Cadarma que sueña que se llama Senén. De uno a otro extremo el cardenal sueña que fue mendigo a las puertas de una iglesia. Se sueña don Fernando Xuan, Cadarma y finalmente Senén. Un toledano soñando que escribe en asturleonés. Cuarenta minutos del sueño primero del señor Niño de Guevara han dado para cuatrocientos setenta y ocho años del tercero alcanzado don Fernando en Senén, que se sueña don Fernando. Gira el trompo. Gira.

LA BARCOCAMA DE LA CADARMA

En asturiano “esnalar” lo mismo vale para volar que para nadar. En castellano podemos “navegar” tanto por el agua como por el aire. Alfredo Bryce Echenique navegaba en su sillón Voltaire sobrevolando el mundo de su memoria; la Cadarma navega todas las noches en su barcocama por el océano profuso de sus sueños, donde le extirpan el tabique nasal soñando en la anestesia del sueño y por accidente le han perforado un ojo que por milagro no ha perdido, le dicen salida del sueño anestésico del sueño. A las tres de la mañana, sin novedad en el ojo, sale para entrar y vuelve a hacerlo a las siete encadenando triángulos de las Bermudas hasta lo de siempre a las once y media, tan tarde porque hoy es miércoles y nadie la espera en el Santo Oficio.

ESE OTRO MUNDO

Enloquecido caballo sin bridas, bicicleta sin frenos cuesta abajo, en ese undoso mundo pasa de todo. El yo asiste, atónito, al baile del ello. La prosa literal del yo se enrosca en nudos alegóricos hasta la llegada del accidente letal, el asesinato o la muerte súbita por las ganas de mear del organismo, la melodía del móvil o que beber en la resaca vasos y más vasos de agua de la fuente clara no sacia. Quién pudiera, como en Inception, ser tan dueño de sí mismo como ahora mismo pueda serlo ante el chuletón de vaca asturiana y el Valmagaz del Bierzo; con los poderes deslimitados propios de ese universo de espacio elástico quién, kamikaze que abre los ojos, ajustar cuentas pudiera con las impotencias de este mundo. Pero no: tan esclavos como un perro, cerramos los ojos y vamos a ese mundo a verlas venir, a sufrir o a gozar como un perro, como la polilla quemada por la luz o la larga siesta del león satisfecho. El tránsito es inevitable para evitar la locura. Y qué loco desea transitar a voluntad.

CLAUSTRO DE AMOR

Llueve que cansa, ese hastío ante lo pertinaz, esa intemperie en la que el hombre a lo pertinaz de la lluvia añade lo contumaz, la persistencia del mismo error que nos limita al animal y recluye en anécdota la Novena de Beethoven y la Quinta del Sordo. Es por eso que agradecemos más que nunca la compañía de doña Do, claustro de amor que nos regala los sentidos otorgándonos sentido y que ayer nos cocinó unas carrilleras que igualaron o juraríamos que mejoraron a las mismísimas carrilleras que un buen día de sol almorzamos, ella y nos, en un sótano de Medina de Rioseco. 

EL FACTOR HUMANO

Aparece en las cenas de empresa de Navidad el factor del tercer hombre, complejo que se desata con la copa de más ajeno a la intimidad y al trabajo. Puede usted certificarlo en sí y en bastantes otros. A las tres de la mañana, usted lo recoge, se lo mete en el bolsillo interior del abrigo y no pasó, en la comedia, nada más allá de la risa.

EL ABSURDO DEL ABSURDO

Soy consciente de que a quien tenga hijos lo puede emocionar la cosa Greta Thunberg, de Suecia. A quien no los tiene, ni los quiso ni los quiere por no prolongarse en este absurdo de la vida y más absurdo con cien mil millones de neuronas, mientras haya cuerda para el político nieto por el vínculo con la natural abuela, la cosa Greta Thunberg, de Suecia, se la trae al pairo. Además, qué más da: la cosa de la cosa Greta Thunberg no tiene vuelta atrás. No lanza este hijo de Satanás las campanas al vuelo por causa misericorde con las criaturas cercanas, que aún no tienen la culpa.

Teclea este hijo de la gran puta madre de Satanás en un portátil cuyo texto irá a parar publicado en la red social llamada por Mark Elliot Zuckerberg Facebook, portátil y red social consecuencias últimas de las causas que están ¿jodiendo el planeta? No. El planeta así no se jode. Lo que se jode, amiguitos, es el statu quo del planeta. Ay de esos hijos.

Salud para que lo viva la fenomenológica cosa Greta.

EL CICLO DE LAS ESPECIES

Lo que tarde el planeta en erosionar la cultura, pulverizarla. Peina la brisa la arena. Burbujas de bajamar indican vida. Hace nada, escasos segundos, horas, días; milenios, eras, parte de esta arena eran edificios, arte e industria, sueños de eternidad. Recuperada, la Tierra, que aún no tiene quien le dé nombre, goza de buena salud. Al compás del giro de la grande, gira sobre sí la luna pequeña. Tiene la estrella que las alumbra miles de millones de años de hidrógeno por delante.

MEMENTO

Nostalgia del Sporting tres Torino cero. Nostalgia de la hoja deportiva. Nostalgia de los futbolines. Nostalgia de los cíber y los videoclubes. Nostalgia de los enamoramientos primeros, de cuando la vi en biquini y enloquecí y empezaba a escribir. Nostalgia, por supuesto, de la edad temprana, que fue lo que dotó de significado intenso al Sporting y a la hoja deportiva, a los futbolines y a los cíber, a los videoclubes y al biquini verde aquel.

Marcó Djurdjevic, ganó el Sporting, y no hubo nada.

Luna me mira así ignorante de que su mayor inteligencia la convirtió de lobo en perro. El perro es el animal especializado en el hombre. El perro entiende del hombre signos que no entiende el simio. En Gijón hay más perros que mocosos. El tigre lo entendió también, en gato, y Tin le toma el pelo a doña Do. A la apacible vaca que pastoreada o industrialmente pasta, sólo tiene que bajar la cabeza, la inteligencia de reconocer la hierba no le dio para tanto y nace para alimento en carne o leche del máximo depredador del planeta. La depredación restante agoniza en reservas y zoológicos. Aquellos que nos comían por entonces. El temible tigre con dientes de sable se acojonó en gato. El grupo de lobos letal previó los tiempos del hombre. El precio que hay que pagar por la comida fácil es el de ser comida difícil para otros. Pero la vaca ni se mueve. La vaca es el cordero de Dios que quita el pecado del mundo. Para el hombre, con sus cien mil millones de neuronas, la dificultad es peccata minuta. Luna, loboperra, come vaca. Los restos sobrantes cocinados de la vaca. ¿Qué perro quiere ser lobo? El perro es el lobo funcionario o lobo pensionista. El problema de todo esto está en que siendo los putos amos de la vida nos creemos los putos amos del planeta, y a poco que suba el mar o se cabree lo que hay bajo la fina corteza que pisamos el hombre todopoderoso va a tener que recuperar el rabo que desechó para metérselo pasando por el culo entre las piernas.

Le decía el agente Smith a Morfeo que el ser humano se comporta como un virus. Se estima que en 2025 seremos ocho mil quinientos millones. ¿Cómo acabar con la destructiva industria? Imposible. Acabe usted con la agricultura y la ganadería intensivas y a ver cómo alimenta ese número de bocas. Acabe usted con la industria y caliéntelas en la oscuridad al calor de una hoguera. No hay marcha atrás: somos demasiados y bastante más enormes que un virus. En esta escapada adelante, queda por ver hasta cuándo la Tierra nos permitirá seguir haciendo de las nuestras. Las tonterías ecologistas son para cuatro pijos que se las pueden pagar gracias a la industria.

De la Rioja alavesa, Baigorri crianza 2016, en la gama del vino que empieza a ser cojonudo. En esta Asturias cadáver de luz, la luz Moulin Rouge del buen vino calienta e ilumina, que falta nos hace. Imitación del sol, la sidra vale para exteriores y subrayar la luz clara del tiempo. La sidra es más un pleonasmo que un sueño, el sueño rojo de noche del vino. Conocí a violentos del cubata y a faltosos de la sidra, jamás a mala gente iluminada al calor Moulin Rouge de un buen vino, que desata las neuronas, que conectan asuntos alejados mas no en el mundo de los sueños; por eso es que escribo casi siempre acompañado por un vaso de bon vino en este mester que traigo fermoso que non es de joglaría, que esta se la dejamos id de enhorabuena a los campeones del Twitter, que cansa; cansa tanta juglaría de campeonato verbal de likes, tanto poeta laureado de ingenio, tanto juego floral.

KLAATU

Hay en el universo pocos planetas que, como este, sean capaces de albergar vida compleja, así que a tomar por saco la especie humana, dijo Klaatu. Lo malo es que The Day the Earth Stood Still, tratándose de ficción interesada, hace que Michael Rennie en 1951 y Keanu Reeves en 2008 se rajen al final por causa de un no sé qué que tenemos los humanos que sólo ven en Hollywood. En 2011 el danés Lars von Trier, extremo, puso fin a tanta tontería haciendo añicos el planeta; además, qué cojones, la vida animal se sostiene diseñada por un dios carnicero. Realmente, el universo es una mierda destructiva y sueño de la ignorancia la música de las esferas.

MANIFESTACIONES JOJÓ DE CONCIENCIA FÁCIL CONTRA EL CAMBIO CLIMÁTICO

La gente de prohibido prohibir y la imaginación al poder les está dejando a los nietos un sistema al borde del colapso. Se ve que imaginación en el poder y prohibido prohibir no han sido buenas ideas. Con eslóganes como estos, sin saber o sabiéndolo le estaban dando alas de mayor envergadura a los de siempre, que son más listos que nadie y todo lo asimilan, no por nada ahí los tienen mandando desde el Neolítico.

Eso sí, oiga, que no nos quiten el smartphone.

CERVANTES REVUELTO

En html, cualquier página web medianamente concienciada respeta más los textos que la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes. Hay que joderse... Servidor en el Santo Oficio y Senén, hasta hace poco, mendigando a la puerta de la iglesia de san Lorenzo. España..., tierra de conejos, del toro solar y de la chapuza.

SOL AUSENTE

Noviembre de sol ausente, nos encontramos en una edad en que lo que apreciamos de los sonetos de amor es el artificio de la pluma, cadena original de la palabra. El sol del Barroco español no habría sido nada sin un interior oscuro, y eso se aprecia bien a los cincuenta y cinco de hoy, con los que ya no impresiona el alma anegada de noviembre. El español medio vive en la inopia del campesino de la alta Edad Media. Al Barroco, que ha llevado al límite los redescubrimientos de los monjes en sus celdas, llega el que sabe, luciérnaga despreciada. Procesión de muertos del insuficiente purgatorio a purgarse acude al Santo Oficio. Los recibe uno que, batallando contra la invasión de los ultracuerpos, estudia el artificio de los sonetos de amor, cadena original de la palabra contra tanta palabra repetida por el español medio, que es el que satura los servicios de urgencias de la sagrada congregación, más sagrada en Asturias que en ninguna otra región de las Españas.

LOS ANIMALES IMPERFECTOS

Y ahora hablemos de fútbol, de nuestro fútbol, de nuestro equipo de animales imperfectos. El Sporting, el de los Fernández, es un club devaluado en SAD. Ajustado a segunda división, la última permanencia en Primera se celebró como si hubiéramos logrado el campeonato de liga. En ese grandonismo de lo pequeño, rozamos ahora el descenso a Segunda B y no nos quiere entrenar ni Dios.

EL ANIMAL PERFECTO

Cristiano Ronaldo, en cualquier tiempo y especie animal, habría triunfado con su biología de libro y espejo. Miope extremo, Don Francisco Gómez de Quevedo Villegas, de nacimiento también estevado y cojo, no hubiera pasado de pasto para cualquier gran carnívoro; con mucha suerte, habría acabado de brujo de la tribu comandada por Cristiano. Ya ven. La cosa quiso que Cristiano y Quevedo fuesen hombres y no tigres y lo fuesen en edad moderna, y por ver queda si de aquí a trescientos setenta y cuatro años hay dios que recuerde quién fue y qué coño hizo el señor Ronaldo.