En un foro facha un chiflado gilipollas busca apoyo logístico para matar a Pedro Sánchez; el PP sigue supurando la hez de la putrefacción y la Cospedal hace mutis por el foro ante un Casado que se tapa las narices; el Tribunal Supremo dice Diego donde digo y el Gobierno lo enmierda y le enmienda la plana con lo que le sale del decreto; los independentistas de uno y otro lado se hacen fuertes en Bruselas; el Sporting cae a Segunda B por el campo gravitatorio del interés de la torpeza. Este Sporting de Dios... Esta España nuestra...

TRIBUNAL SUPREMO

La derrota de superíndice 1 del Tribunal Supremo y su homónima la derrota de superíndice 2 suponen un nuevo hostiazo de autoridad del neoliberalismo del gigante privado. Por esta derrota -superíndices 1 y 2-, que Dios nos ampare, y ya se sabe qué ocurre bajo el amparo de Dios disuelto el Estado. Por unos y otros, el Estado en España se desvanece: por vez consecutiva el poder que ampara se ha quedado con las vergüenzas al aire. En derechura curvado estudia usted derecho; quitándole luz al sol se licencia usted; se sumerge en las de juez en un fondo abisal de PDF y legajos que pretenden matematizar el comportamiento humano; por lo que sea es usted uno de los que han trepado hasta la rama del supremo poder judicial del Tribunal Supremo y simio superior ha enroscado en ella el rabo. A su gusto despacha y sentencia usted a gusto del poder otro legislativo, segunda cara de la trinidad estatal. Hasta que un tío Gilito con sombrero de copa lo pone a usted a mamar y de golpe usted comprende, Tribunal Supremo abajo hasta las primeras horas de estudio en derechura curvado, lo que mi amigo el veterinario, lector entonces de Don Miki, ya sabía en EGB.

"María Magdalena", con Joaquin Phoenix y Rooney Mara, me ha pillado frío, sabedor desde hace bastante tiempo de que la Magdalena solo fue puta en interés de la Iglesia y convencido de que a Jesús de Nazaret no hay dios que lo entienda a poco que se hurgue en el Nuevo Testamento. Yo lo veo así: alguien una vez en su propio beneficio se hizo cargo del miedo colectivo a la muerte y perfeccionó las primitivas y confusas ultratumbas modelando dioses y dictando textos regulativos. La perfección del disparate se logró con el monoteísmo nacionalista de Israel: a la vista están sus ecuménicos resultados. Y ahora viene Barth Davis y nos cuenta la perspectiva femenino-feminista del cotarro.

LAS COSAS DE PALACIO

Efectivamente, el tiempo es relativo. No son las mismas horas las del Lidl que las del IPSO (Instituto para el Personal del Santo Oficio) nada facto. En lo que el Lidl le levanta a usted en el barrio un local harto macroscópico, el IPSO abre la boca y bosteza un solo bostezo en un tiempo que de tan microscópico se vive en eternidad.

VAN DESPACIO

PGE ERC JxCAT EN EL CORRAL DE LA COMEDIA

Los señores Casado, Rivera y Martínez Oblanca estarán que aplauden con las orejas gracias al nacionalismo facha de Torra Puigdemont y al de la esquerra, que en Internacional minifundista lo es solo de Cataluña. La cara de pijos que se les habrá quedado a los de la Internacional global de Podemos debe de ser para ampliar y enmarcar. Estos nacionalistas del carajo tienen el poder que tienen gracias a la constitución de la que abominan y a la subsiguiente ley electoral. El morro que le vienen echando a esto de los pactos es de cocodrilo. Pedro Sánchez tendrá que meterse la carnada por el culo. Y los presupuestos generales del Estado.

EL ÉIBAR, DE PRIMERA DIVISIÓN

Cuando el Sporting de los Fernández se vio otra vez con libertad de gestión y obró desmantelando el Sporting de los guajes le dije hasta otra a El Molinón de intramuros, un hasta luego que llega hasta hoy para seguir vigente hasta que la SAD se meta en otro lío y el señor Tebas nos prohíba fichar, porque los Fernández no sueltan la teta del Sporting mercantil así lluevan ranas bíblicas y por otra parte a ver quién es el tu fe nunca decaiga que se hace cargo de él. Esta mañana no ha sido el señor Tebas sino el experimentalismo propio de la Copa del Rey lo que nos ha hecho recordar tiempos mejores de guajes a la fuerza.