EN EXPECTATIVA DE INGRAVIDEZ
Mi sportinguismo, supongo que como el de todos, es ora grávido, ora ingrávido. Hállase, ahora mismo, en expectativa de ingravidez. El almacenista de Ikea obró milagros con los del B, que ascendió de Tercera a Segunda B, la temporada pasada jugó inútil promoción de ascenso a Segunda y esta, desmantelado para el de Segunda, ahí queda quinto, a un punto de la promoción de ascenso, por encima de los pequeños azules. Fútbol sin balón de líneas juntas y presión adelantada en campo enemigo, con balón fútbol directo sin pase atrás. Fútbol para futbolistas con pulmones identificados con su escudo.
Mi sportinguismo, supongo que como el de todos, es ora grávido, ora ingrávido. Hállase, ahora mismo, en expectativa de ingravidez. El almacenista de Ikea obró milagros con los del B, que ascendió de Tercera a Segunda B, la temporada pasada jugó inútil promoción de ascenso a Segunda y esta, desmantelado para el de Segunda, ahí queda quinto, a un punto de la promoción de ascenso, por encima de los pequeños azules. Fútbol sin balón de líneas juntas y presión adelantada en campo enemigo, con balón fútbol directo sin pase atrás. Fútbol para futbolistas con pulmones identificados con su escudo.
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